Monseñor Martinelli habla de escalada 'repentina' tras la decisión de Trump de declarar a los Houthis grupo terrorista. Los riesgos de un «conflicto abierto» con «consecuencias» dramáticas para la población civil. La extrema pobreza y la dificultad de impulsar proyectos humanitarios. La labor de las monjas de la Madre Teresa 'un punto de referencia' para los cristianos que quedan.
En este país devastado por más de 10 años de guerra, hay personas muy jóvenes, incluso de 13 años, que conducen taxis o transportes públicos. Esperan ganar aunque sea pequeñas cantidades de dinero para mantener a familias empobrecidas. ONU: la crisis desencadenada por el conflicto «ha afectado de forma desproporcionada y devastadora a mujeres y niñas».
Para AsiaNews, Mons. Martinelli considera «urgente» relanzar la «presencia» de la Iglesia en el país atormentado por los conflictos y la violencia. El testimonio de las monjas, el trabajo de Cáritas y la realidad cristiana local. Los misiles Houthi hacia Israel, la neutralidad del Golfo y el frágil equilibrio con Riad y Teherán. La Casa de Abraham como modelo de encuentro, confrontación y oración.
Mons. Martinelli subraya a AsiaNews el vínculo que hace que la declaración firmada ayer en Yakarta y el texto de 2019 sobre la fraternidad humana sean «diferentes y complementarios». En un mundo marcado por la guerra «el peligro es acostumbrarse a la deshumanización». Son imprescindibles «símbolos fuertes» como el Túnel de la Amistad o la Casa de Abraham. Del Papa también la llamada a mirar en profundidad» en el diálogo interreligioso, volviendo “a la cuestión de Dios como cuestión humana fundamental”.
El estudioso jordano hace notar a AsiaNews el grado de "autonomía" con el que actúa Nasrallah, que ha transformado al Líbano en "primera línea" para proteger los intereses de Teherán. Las milicias apoyadas por la República Islámica en los distintos países de Oriente Medio están al servicio de la estrategia del caos. Pezeshkian es el rostro "dialogante" con Occidente para aliviar las sanciones.
Otra embarcación que transportaba a 45 refugiados se hundió en las últimas horas precisamente en el tramo central de las rutas comerciales que tanto preocupan por los ataques de los hutíes. El año pasado, casi cien mil personas recorrieron ese mismo trayecto que la Organización Mundial para las Migraciones califica como el más peligroso del mundo.